Hay una serie de teorías sobre el origen de la luna . Nuestra mejor suposición es que se formó cuando la Tierra fue golpeada por un gran objeto conocido como Theia. El impacto arrojó enormes cantidades de escombros a la órbita, que finalmente se unieron para formar la luna.
Hay un problema con esta teoría. Los modelos matemáticos muestran que la mayor parte del material que compone la luna debe provenir del objeto que se topó con ella. Pero las muestras de las misiones de Apolo muestran que la mayor parte del material sobre la luna provino de la Tierra.
Un documento publicado esta semana en Nature Geoscience tiene una posible explicación. La investigación de Jay Melosh en la Universidad de Purdue y sus colegas sugiere que, en el momento del impacto, la Tierra estaba cubierta de magma caliente en lugar de una corteza externa dura. sería más fácil arrojar material proveniente de la Tierra al espacio que luego podría endurecerse en la luna.
Esta teoría se basa mucho en la sincronización de la formación de la luna. La Tierra tendría que estar en un punto dulce de calor y consistencia de magma para que la teoría fuera cierta.
Además, como explica Melosh en el documento, esta nueva simulación aún no marca todas las casillas necesarias para obtener nuestra luz lunar. Observaciones en línea con nuestras teorías, pero es un paso importante para acercarnos a una solución.
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