Con Uber a pocos días de salir a bolsa, un pequeño retador ha recaudado algunos fondos propios para llevarlo y el resto del campo en los mercados francófonos. Heetch una plataforma para compartir viajes con sede en París con operaciones en Francia y África francófona, ha obtenido una Serie B de $ 38 millones, con una valoración que entendemos en alrededor de $ 150 millones. [19659002] Las papas muy pequeñas en comparación con el valor de $ 90 mil millones que algunos han asignado a su competidor mucho más grande. Pero la lista de inversionistas de Heetch – una combinación de jugadores estratégicos y financieros – habla tanto de la oportunidad sin explotar que los inversionistas (y los fundadores) creen que todavía existe en el mercado más amplio, y del hecho de que muchos creen que Uber no lo hace. No nos ocupamos de todo y de todos, y aún queda espacio para que más compañías aborden la necesidad de transportar personas de diferentes maneras. (De hecho, otros como Gett, que esta semana anunciaron una ronda de $ 200 millones también aprovechando estas brechas.)
La ronda está siendo liderada por Cathay Innovation y Total Ventures (el brazo de inversión del petróleo y gigante de la energía), con la participación de los accionistas existentes Idinvest Partners, Innov'Allianz, Alven, Felix Capital y Via-ID, y eleva el total recaudado a alrededor de $ 70 millones (como resultado de rondas anteriores de $ 12 millones en 2017 y $ 20 millones en 2018 ). La financiación se utilizará para llevar a Heetch a más mercados, hoy en día en Francia, Bélgica, Marruecos y Costa de Marfil, y el plan es expandir Argelia, Camerún y Senegal más adelante este año, así como seguir contratando, en particular ingenieros en París.
También es útil que Heetch haya tenido su parte de interés por parte de los adquirentes a lo largo de los años, incluido, según cuentan nuestras fuentes, un enfoque de una de las plataformas de viajes compartidos más grandes del mundo. (Fue rechazado por el bajo precio ofrecido).
Teddy Pellerin y Jacob Matthieu fundaron en 2013 en el año 2013 para cubrir lo que consideraba una clara brecha en el mercado de París: proporcionar viajes a más de 20 años de distancia en las afueras y los suburbios de París después de las salidas nocturnas en los clubes de la ciudad, un mercado que no estaba siendo atendido por otras compañías de taxis, ni por el transporte público.
Como Pellerin, quien ahora es el CEO, lo describe, Heetch adoptó un enfoque informal para resolver este problema casual de los pasajeros: la idea era hacer que el servicio fuera realmente igual a igual, contratando a conductores que tuvieran la misma edad y al igual que las personas que estaban siendo conducidas (podrían haber regresado a casa de los mismos clubes) ).
La idea se prendió de forma viral con su base de usuarios: ¿esperaría algo menos de un servicio dirigido a los millennials? Pero, desgraciadamente, no con los reguladores, que cerraron el servicio por no usar conductores con licencia.
Irónicamente, fue justo cuando se le acercó a Heetch para que lo adquiriera, y también estaba recogiendo su primer financiamiento de de Félix .
"Tomamos un enfoque diferente cuando los respaldamos", dijo Antoine Nussenbaum, quien lideró el acuerdo para Félix. "Hicimos una declaración firme: creemos que en las categorías de servicio que se sienten mercantilizadas, se puede construir una comunidad y experiencia específicas, y eso ha sido más que probado hasta la fecha con Heetch".
En el modo de barbecho, la compañía reconstruyó se centró nuevamente en trabajar con conductores profesionales, pero al mismo tiempo que trataba de mantener algo del espíritu que lo hacía destacar de otros como Uber y el otro gran jugador en el mercado en Francia, el Chauffeur Prive, de propiedad mayoritaria de Daimler (que a principios de este año cambió su nombre a Kapten ). Al continuar sirviendo a los usuarios más jóvenes; conducir a partes del área metropolitana más amplia que otros no lo harían; tomando un corte más pequeño de los conductores para incentivarlos a conducir con Heetch sobre otros; y adoptando un enfoque de "buen tipo" para el negocio.
"Somos más como Lyft", dijo Pellerin. “Tenemos un servicio amigable, con buenas interacciones entre los conductores y los conductores. También somos mejores para atender a los usuarios más jóvenes porque somos un poco más baratos ".
Y agregó un giro: vio la oportunidad de exportar su modelo a otros mercados francófonos donde la infraestructura de transporte público y privado no estaba demasiado desarrollada, y su La aplicación podría ajustarse mínimamente para trabajar. En estos días, Pellerin dijo que si bien París sigue siendo el mayor mercado de Heetch, su segundo mayor mercado hoy es Casablanca en Marruecos (y Bruselas en Bélgica es el tercero).
Irónicamente, para una compañía que comenzó su andar violando claramente las regulaciones locales, una Un aspecto notable de cómo está creciendo Heetch es que hoy está ajustando su modelo para adaptarlo a los requisitos reglamentarios y de otro tipo en cada país, lo que podría incluir trabajar con conductores profesionales o incluso pintar automóviles de un color específico para operar un servicio de alquiler.
Curiosamente, hay otra forma en que la compañía es diferente de Uber (que acumuló $ 1 mil millones en pérdidas en el último trimestre): está cerca de ser rentable, señaló Pellerin, en los cuatro mercados en los que está activa hoy.
"Estamos muy orgullosos de unir fuerzas con Heetch y su talentoso equipo. Estamos convencidos del potencial de Heetch y creemos en su estrategia de desarrollo en Europa y África, una región que supervisamos de cerca. Millones de africanos podrán beneficiarse de los servicios de Heetch. "Esta inversión encaja perfectamente con nuestra tesis de inversión sobre movilidad y complementa nuestra cartera global en el espacio que incluye Drivy-Getaround, Momenta, Glovo y OnTruck", dijo Jacky Abitbol, socio de Cathay Innovation, en una declaración.
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